Cuba se posiciona como uno de los destinos más privilegiados del Caribe para la práctica del submarinismo, gracias al compromiso sostenido con la conservación de sus fondos marinos y la protección integral de los ecosistemas que conforman su archipiélago. Esta vocación ecológica ha permitido preservar entornos submarinos de extraordinaria belleza y biodiversidad.
Desde los extensos arrecifes coralinos que bordean su plataforma insular hasta las formaciones rocosas y túneles naturales que albergan una vida marina vibrante, cada inmersión es una experiencia sensorial única. El colorido de los corales, la presencia de especies endémicas y la transparencia de sus aguas cautivan tanto a buzos experimentados como a quienes se inician en esta apasionante actividad.